martes, 15 de julio de 2008

Achaques

Un día, no recuerdo muy bien cual, la luna se encontró con el sol y le dijo:

-Estoy preocupada. Acaban de decirme que los cráteres de mi piel es irreversible.

-No te quejes- Le contesto el sol - A mi me acaban de encontrar en la espalda unas extrañas manchas solares.

En eso la tierra que escucha la conversación se acerca a ellos y les dice:

-Sois unos llorones... Fijaos en mi, yo retengo líquidos y encima estoy llena de parásitos.

© Richard Archer - 2008 (Todos los derechos reservados)

1 comentario:

Anónimo dijo...

¡Ja, ja, ja! ¡Bravo!